Diálogo más allá de las imágenes.
Vi las pinturas de Mónica Contreras por primera
vez cuando ella estaba haciendo una residencia en el Centro de las Artes de
Banff, Canadá.
Quedé intrigada de inmediato por el proceso para
crear imágenes, ya que le dedica mucho tiempo y es laborioso e intensivo.
Sus
cuadros son pequeños y trabajar a esta escala le ha permitido refinar una
íntima relación entre lo pintado y los materiales de lo que está hecho,
desarrollando así un proceso creativo en el cuál la cualidad pictórica del tacto se convierte
en un elemento esencial.
El uso del palimpsesto ha sido un aspecto
constante en su práctica y lo que es
particularmente interesante en su trabajo actual es la ambigüedad de esta
superposición. Uno no está completamente seguro si el propósito de este proceso
es revelar gradualmente el motivo del cuadro u ocultarlo. Como espectador, ¿se
nos está dando acceso se nos está negando?. El trabajo de Mónica no es
prescriptivo, no es acerca instruir o decir algo, más bien, invita a su
espacio, una superficie en la cual uno es conducido a través de un proceso de
pensamiento y una serie de preposiciones.El espacio de las pinturas y el que el
espectador ocupa son distintos, esto crea una dislocación que cuestiona el
mismo proceso de hacer arte y nuestras percepciones de las condiciones y los
lugares para el consumo del mismo.
En Museo de Franquicia vemos la imagen del
museo Guggenheim, este espacio para el gran arte es repetido continuamente en
varios cuadros, donde está pintado con líneas muy simples, básicas, en las que
se usaron materiales comunes y baratos. El diálogo que esto provoca, es
reforzado y va más allá por la presencia de trabajos como el de Jeff Koons en
la entrada del Museo en Bilbao. Koons, conocido por sus trabajos provocadores
que a menudo cuestionan la responsabilidad
del arte, qué significa ser artista y cómo él define realmente la vida. En una
entrevista en Journal of Contemprary Art , dijo que “ El alma de el objeto debemos
mantenerla confiando en el espacio donde se encuentra” Esto parece contener
algo de la esencia de la investigación de Contreras: un cuestionamiento acerca
del objeto como arte y los espacios controlados, esterilizados en los cuales se
exhibe.
En los
trabajos de esta exposición hay tantas
cosas como las que el espectador encuentre en ellos. Hay profundidad en las
pinturas y mucho que descubrir en ellas, sin embargo, esto le llevará tiempo y
una disposición especial para averiguar y deconstruir los gestos y elementos
visuales que se encuentran en las imágenes
Christina McBride
(Traducción de Roberto
Bravo)